DISEÑO. Historia, Teoria y Práctica del D. I.

DISEÑO. HISTORIA,TEORIA Y PRACTICA DEL DISEÑO INDUSTRIAL
BURDEK

Editorial: GILI Tema:
Diseño industrial > Historia y movimientos

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Bernhard Bürdek

“El diseñador opera en un término intermedio entre el grafismo y el diseño industrial, ya que la función de un producto debe diseñarse visual, táctil y acústicamente de tal manera que resulte inteligible por el usuario”




Bernhard Bürdek nace en 1947, en Alemania, realizando en un principio sus estudios en la Escuela Superior de Diseño de Ulm. Luego efectúa actividades en la Escuela Estatal de Artes Plásticas de Kassel, en el Instituto para la Planificación del Medio Ambiente de Ulm y también, en la Universidad de Stuttgart.

A su vez ha trabajado como consultor de diseño y creador de productos antes de iniciar su carrera universitaria. Desde 1979 se desempeña como profesor en la Escuela Superior de Diseño de Offenbach, donde se especializa en temas como diseño del producto, identidad corporativa, diseño corporativo y diseño de interfase.

Se destaca como una de las obras importantes de Bürdek, “Diseño, Historia, Teoría y Práctica del Diseño Industrial, donde analiza los campos importantes del desarrollo del diseño industrial a partir del siglo XX abordando con particularidad, la escuela de la Bauhaus. Para ello hace una vinculación entre los antecedentes documentales e históricos, con el estudio de los principios teóricos del diseño. Realiza un análisis de la evolución de la metodología en diseño, diciendo que la metodología del diseño industrial se origina con Christopher Alexander, quien planteaba en primer lugar estaba la complejidad de los problemas a resolver, los cuales sobrepasaba la manera de encararlos de una manera puramente intuitiva; la cantidad necesaria de información excedía la capacidad del diseñador solitario para reunirla y elaborarla, ya que el número de problemas proyectuales se había multiplicado rápidamente y la transformación de dichos problemas era tan veloz que no se podía recurrir a experiencias aseguradas por el tiempo.

Bürdek coincide con Bonsiepe en que se comienza a efectuar una nueva visión del diseño la cual comienza a desarrollarse a partir de las necesidades del usuario, ya que sostienen en el mercado del diseño respuestas a las preguntas que responden a las necesidades del usuario.

Bürdek dice que ha cambiado la relación diseñador-producto, esto refiriéndose a la comunicación inmaterial, por ello es que existe una nueva visión de diseño, ya que, hoy en día el ser humano acepta la comunicación táctil y oral tanto como con las máquinas. El diseñador deberá cuestionarse cómo comunicarse con las máquinas. Siendo así el diseñador del futuro el que explote las estructuras y las funciones de los microprocesadores, convirtiéndolos de este modo en sus herramientas de pensamiento para posibilitar el diseño de interfases virtuales. De este modo el diseñador centrado en el usuario es el que genera pautas de acción nueva y abierta, no sistemática, para que permitan llegar al mismo resultado tomando distintos caminos, según distintos esquemas de comportamiento.

Refiriéndose a la des materialización creciente de los productos, añade que se ve reflejada en la reducción volumétrica de sus componentes, siendo lo físico lo que desvanece cobrando importancia la información.
En cuanto al diseño de interfase, Bürdek toma como ejemplo el diseño de computadoras, donde la interfase fue diseñada desde el comienzo, pero aún así, debido a la costumbre, lo primero que se desarrolló fue el diseño de los componentes físicos de la interfase. El concepto de interfase se extiende tanto al o virtual como a sectores físicos de interacción hombre-aparato, radicando así la diferencia en la complejidad en la incorporación de los componentes.

Bürdek, señala, que el diseño en su comienzo era meramente escultórico, formal, siendo las aportaciones más importantes del diseño actual la liberación de las reglas dictadas por “el buen diseño”, por la revelación de nuevas formas de lenguaje y de nuevos caminos para la producción y la distribución. Esto nos permite ver que la obra de arte y el diseño son bienes culturales que se diferencian perfectamente entre sí ya que la diferencia de la metodología proyectual entre diseñador y artesano consiste en las fases del proceso productivo, siendo los pasos diferentes al estar dirigidos a mercados diferentes.